De acuerdo con una reciente sentencia en primera instancia, este ha reconocido a una madre de familia monoparental el derecho a disfrutar de diez semanas de prestación por nacimiento y cuidado de hijo -que se suman a las dieciséis que ya han disfrutado-.
El magistrado considera que no ampliar esa prestación y dejarla en las dieciséis semanas de permiso por maternidad que tiene toda mujer, resultaría discriminatorio para el menor.
El magistrado explica que seis de esas dieciséis semanas se deben disfrutar inmediatamente después del nacimiento del bebé, por lo que si a las demandantes se les concede dieciséis semanas más implicaría una desigualdad: “La familia monoparental disfrutaría de 32 semanas frente a las 26 que disfrutaría la biparental en caso de alternancia entre los progenitores en lugar de disfrute conjunto”, añade.
Así, deja en diez semanas la prestación adicional a la que tienen derecho, tal y como pedía subsidiariamente el Instituto Nacional de la Seguridad Social, entidad demandada.