El Tribunal Superior de Justicia de Madrid ha avalado la legalidad del cese de un carpintero durante su periodo de prueba, pese a que sufrió un accidente laboral y estuvo de baja médica. Según la sentencia, la decisión empresarial no constituyó un acto discriminatorio por motivos de salud, ya que se adoptó antes del accidente y se fundamentó en la falta de idoneidad del trabajador para el puesto. La empresa había comunicado previamente a su gestoría la decisión de finalizar el contrato tras recibir informes de compañeros/as que señalaban errores en tareas básicas.
El TSJ recuerda que, durante el periodo de prueba, el empleador puede extinguir el contrato sin necesidad de justificar su decisión, salvo que se vulneren derechos fundamentales. Aunque la proximidad temporal entre el accidente y el despido podría haber generado sospechas de discriminación, el Tribunal sentenció la no existencia de tal discriminación puesto que la empresa aportó documentación que acreditaba la decisión previa al incidente.
