El Proyecto de Ley de fomento del ecosistema de las empresas emergentes, más conocida como Ley de Startups, se enmarca en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, e introduce numerosos cambios que buscan apoyar el ecosistema de empresas innovadoras de base tecnológica, así como atraer talento e inversiones internacionales.
Entre las novedades, cabe destacar la gratuidad de aranceles respecto a notarías y registros, en la constitución de sociedades limitadas, así como en la publicación en el Boletín Oficial del Registro Mercantil (BORME) para los inversores no residentes, exigiendo, únicamente, que tanto ellos como sus representantes obtengan los números de identificación fiscal.
Asimismo, con los fines mencionados, la normativa introduce, entre otras, las siguientes medidas fiscales:
- Se suaviza la tributación inicial de las empresas emergentes, reduciendo el tipo del Impuesto de Sociedades del actual 25% al 15%, durante un máximo de cuatro años, siempre que la empresa mantenga la condición de empresa emergente. Además, se extiende a todas ellas el aplazamiento del pago de las deudas tributarias durante los dos primeros años de actividad.
- Se eleva el importe de la exención de los 12.000 a los 50.000 euros anuales en el caso de entrega de acciones o participaciones a los empleados de empresas emergentes.
- Se aumenta la deducción por inversión en empresa de nueva o reciente creación, incrementando el tipo de deducción del 30 al 50% y aumentando la base máxima de 60.000 a 100.000 euros.